¿Cuál es el impacto económico de un producto defectuoso?

En fechas recientes ha habido una serie de casos de productos defectuosos de alto perfil, que van desde vehículos peligrosos hasta teléfonos móviles defectuosos y secadoras. El impacto negativo en un negocio puede ser de gran alcance y puede incluir daños significativos de marca, operativos y financieros. La pregunta es, ¿se puede cuantificar el costo que tal evento podría tener en su negocio?

¿Cuáles pueden ser las pérdidas?

Un producto defectuoso puede provocar la retirada del mercado, lo que implica la recuperación y la provisión de compensación por productos defectuosos. Los costos inicialmente recaerán en el distribuidor, productor o fabricante del producto final, pero otras partes en la cadena de suministro también son potencialmente responsables a través de la subrogación contractual de un componente defectuoso.

Los costos directos resultantes de un producto defectuoso pueden incluir:

• Notificación.

• Transporte y reempaque.

• Destrucción y eliminación.

• Reemplazo de producto.

Más importante aún, un defecto del producto puede provocar publicidad adversa, daños a la reputación y pérdida de ingresos. Esto puede conducir a un proceso de recuperación costoso y lento para reconstruir las ventas, la participación en el mercado y la confianza en una marca.

¿Qué tan costosos pueden ser estos eventos?

Los costos asociados con productos defectuosos pueden ser significativos. Varios incidentes en los últimos años han costado más de mil millones de dólares, y uno de los más grandes hasta la fecha, causado por teléfonos defectuosos, se estima que costó más de US$5 mil millones.

Por lo general, varios de los costos principales caen fuera de la protección ofrecida por el seguro tradicional de responsabilidad del producto, lo que significa que se necesita una cobertura adicional para evitar que la empresa asuma el costo. El modelado de pérdidas puede ayudar a las empresas a decidir si comprar "seguro de producto defectuoso" es financieramente eficiente en comparación con retener el riesgo en el balance general.

¿Por qué cuantificar las pérdidas potenciales y cómo se hace?

Una mayor regulación de seguridad del consumidor, cadenas de suministro globales y una mayor integración de productos significa que los productos defectuosos representan un riesgo financiero creciente para las empresas e incluso las industrias. 

Mediante el uso de siniestros de la industria y escenarios a medida desarrollados a través de discusiones con representantes comerciales, es posible modelar estadísticamente una gama completa de posibles resultados de pérdida y su respectiva probabilidad de ocurrir.

Se consideran factores como las cadenas de suministro, las redes de distribución, los tamaños de lote, los costos de producción, los clientes clave y los planes de contingencia. El resultado puede informar la idoneidad de los límites de las políticas y los niveles óptimos de retención en vista del apetito de riesgo y la tolerancia al riesgo de una empresa.

Comprender las posibles desventajas después de un incidente de producto defectuoso ayuda a enfocar los planes de respuesta e informar las decisiones de compra de seguros. Las aseguradoras, los corredores y las empresas pueden trabajar juntas para reducir la probabilidad y la frecuencia de pérdidas potenciales mediante la identificación de factores de riesgo clave y el uso de modelos de riesgo para cuantificar el impacto de las mejoras.

Calcular su exposición potencial es un paso importante para decidir una estrategia de financiación de riesgos informada. Y usted, ¿sabe cuánto le costaría a su empresa un producto defectuoso?